viernes, 4 de marzo de 2011

Relato

Yo nací en León, un 5 de diciembre de 1965 a las 14 horas.
Me llamo Armando Castellanos García, invidente de nacimiento, pero, con una vida por delante a la hora de superar la discapacidad que padezco, que la sociedad lo toma como un pecado.
En aquellos años, no había en la ONCE un equipo de atención temprana ni estimulacón precoz, y sobre todo, (que es lo más importante) cómo la familia y lo que te rodea deben asumir tu discapacidad, y cómo ayudar y educar de forma adecuada, al tener ese handicaped.
A los 6 años, ingresé en un colegio de la ONCE, ya que, en aquel entonces no había educación integrada en centros ordinarios cerca de tu domicilio, en ese momento creí que estaba muriéndome en vida como si de un cementerio se tratara .El primer día que ingresé en ese colegio, fue un 17 de septiembre de 1971, había para comer alubias con arroz, y cuál sería mi sorpresa que me decía a mi mismo y satificándome a la Virgen del Camino que sieno un internado tengo que comer de todo. Ese colegio de la ONCE estaba ubicado en Pontevedra, y se llamaba Colegio Santiago Apóstol, donde estuve 7 años aprediendo a leer y escribir en sistema Braille. Recuerdo como alumno de nuevo ingreso, la profesora de párvulos, nos ponía discos de cuentos infantiles. Con esto, no quiero aburrir a todo aquél que siga mi blog, ya que el mundo de los invidentes en esta sociedad tan hipócrita que vivimos, es totalmente desconocido.

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